COLORES CIEGOS

Alego con mis adentros, el color es lo de menos, mis ojos no perciben algun tono distinto, los grises ahogan la viveza de la realidad, desteñida, mi esperanza flota boca a bajo sin dar señales de vida, rondan las bestias y los sinsabores, soy presa fácil, no hay razon para inquietar al mundo, estoy fuera de su alcance, ¿será que mis manos no se merecen palpar la gloria?, que estos ojos tristes no son dignos de mirar al cielo, ciegos por la membrana absurda de una realidad cruel y bastarda, que devora pedazos de mi corazón, que araña los trozos de mi alma que han quedado, como mero entremes. Sin embargo este mirar terco y pagano, aun puntua su horizonte hacia el otro extremo del vacio, aprender a volar o morir en el intento, los colores mueren en mis manos, en mis ojos, en mi imaginación, el blanco y negro victíman mi ilusión y transtornan mis sentidos. El vacio profundo luce acogedor, en contraste con la caida, que mas que atemorizarme, me redime en el dolor de que con las manos y las alas atadas, no podré anticipar el golpe ni la vida.