Soy un bicho raro, encerrado en el tiempo,
ignorado y lejos sin animo, sin entimiento,
la pasión abrasa, el calor explota,
los cuerpos se turbian, las palabras gozan,
demostrando tierno, que el sudor empapa,
que me dejas muerto, que el desprecio mata.
Casualmente vestí de negro,
ignorante de lo que el destino preparaba,
las sospechas confirman a tiempo,
que la ilusión y su amor acaban,
que se abre el pecho, sin corazón, sin alas,
que ya murió en el lecho, el cariño que me inspiraba.
Me dirán que soy un terco, por creer en el amor,
cayendo en contratiempos, de no saber nada,
de averiguar la incognita fría y rígida,
de un amor calculador y ajeno,
sin saber mas que tu sonrisa, tu mirada, tu cuerpo,
para otras manos mostraran su hermosa cara.
Inhibido por el destino, mi corazón se desangra,
te has llevado el último trozo de mi esperanza,
en tus manos, mis sueños, mis anhelos, mis versos,
no alcanzan, distantes y adversos, siempre tuyos, siempre bellos,
alucinación emocional que cabas junto al féretro,
entierra esta ilusión, canta este requiem y quedate alla dentro.
El negro es elegante y también sirve para dar la bienvenida a la nueva esperanza, a los nuevos sueños y anhelos… y si sigue siendo igual de terco…la ilusión renacerá!!!
ResponderBorrarmmm sera??? naa el negro es oscuridad....y de eso estamos llenos, solo hace falta una chispa que lo haga salir
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